VOCES

COSTEÑOL SIN BARRERAS

¡Tran! Trac-trac ¡tram! Tra- tra ¡pam! rra- rra rra- rra rra- rra iuuu- uuui- iuuu ¡yiiii! ¡yiiiii! ¡yi! tui tuii tui tui tui tuu ti… Marica, guasapeaba a tutiplén con Kaita y zurckerbergueaba daha con Gates. La nena toda áis seguía mis jugadas, y a punto de caerle, ¡ké boleta! el rinton corroncho sabanero: Érda, la madrina, ké oportuna. -Ooooh niña Ermela – mascullo, paneando por pillar los orejones, risa de un pupi , ké fastidio!
-Ajá Jose – canturrea- ¿Y cómo estás? -Niña, ¿tiene otro calabazo alumbrador? – le preguntan.
-Va pué mujé, dirás un foco, espera Jose –me pausa.- Busca en la alacena. Arriba, ten cuidao – cuando oigo ¡zuás! ¡trácata! –Ércole, presta cá. A vé pa vé cuantoj rrompijte – manda.
-Mira Jose – se reconecta- que Elíaj te tiene una noticia.
-Pásamelo, Ermela- la apresuro.- ¡Háu hau!
– Anda Max! ¿Y este perro porqué late? Espera ejtá atrá, bajo el níspero- va diciendo.
Cuchichí ¡Glu-glú! ¡Glu-glú! Cuchichí cuchichí kokoroyó kákáká kákáká ¡Glu-glú! Cuchichí.
–Uffa que bochinche –una voz masculina- ¡Érda, tanta moto! ¡No se oye es ná! ¡Cierren esa puerta!
-Ombe bien – responde al saludo- ¿Esos cachachos enrruanaos ya te tienen aburrío? ¡Se murió Ananía!
-Ombe , qué vaina!, no sabía que había muerto .- riposto.- Oómbe, por qué no lo trajeron? A lo mejó algo le hubieran hecho.
-Lo cogió de sopetón, las cosas fueron así como te digo- devuelve.
-Ombéee, cómo va a ser posible? – incrédulo. – Y tú ¿se lo dijijte ante?
– Oómbe, se me olvido decirle.- lamenta
-Iíraa,- acuso- no seas embujtero.
-¡Iraa!, -se ofende- ¡si que ere fadto!
-¿Y ahora?- peleo- No es na´morirse, si no lo que duras muerto!!!
– Oye pelao, deja de sé pelionero- de fondo pide Ermela.
-Ira, si, qué vaina – acepta Elías.
-Quedé ñuñío- concluyo- Esas barras se perdieron.
-Ira, quién dijo? – suavecito- Tú a la vieja Toña le mandas el recibo.
¡No joda!- protesto.
Oómbee, más claro pa donde? – termina.